La Prueba cap final por Elena Siles

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Capítulo 20: EL GRAN FINAL

La flecha de Cat se hundió en la rodilla de Howard y la bala de su pistola se desvió y en vez de ir a parar a Brittany fue a parar al hombro de Cat. Howard al ver a Simon correr hacia él huyó como pudo de aquel escenario y se adentró en la isla.

— ¡Cat!— acudió rápidamente Simon junto a ella— ¿Estás bien— Cat asintió como respuesta— No debí dejarte hacer esto sola
— ¡Eh!— se quejó Wesley— No estaba sola.
— Quiero decir sin mí. Maldita sea— farfulló Simon al ver cómo sangraba Cat y taponó la herida con sus manos— Wesley saca de la mochila de Cat el botiquín, voy a curarla— Wesley le tendió el botiquín a Simon y él le quitó la ropa a Cat para poder ponerle las vendas— Gracias— Simon comenzó vendar a Cat— ¿Mejor?— Cat asintió como respuesta.
— Gracias, por salvarme, me llamo Brittany. La chica que ha muerto es Caroline, pobre Caroline, ella sólo quería salvarme del tipo ese, Howard.
— No te preocupes, soy policía y haré que paguen por todo esto— aseguró Simon.
— ¿Y cómo piensas volver a casa?— preguntó Wesley.
— No os preocupéis por eso— intervino Brittany— Conseguí un localizador de unos de los cazadores, por lo visto se lo había colocado alguien de afuera, inutilicé los sistemas que hacen que no funcione y pronto rastrearán la señal. Sólo tenemos que esperar.
— Vaya, no me esperaba esto de ti, debo admitirlo— reconoció Simon.
— ¿Por qué no?— quiso saber Brittany.
— Porque al principio quisiste matarnos a todos, lo vi en tu mirada— respondió Simon.
— Estaba asustada. No pensé que hubiese otra salida para mí; pero ahora las cosas han cambiado. Muchas cosas han cambiado para mí— contestó Brittany.
— Creo que con vendarme no basta Simon— intervino dolorida Cat.
Simon observó cómo la herida seguía sangrando— Tengo que llevarte a un hospital antes de que sea demasiado tarde. Debemos coger el barco y huir inmediatamente de esta isla si queremos que sobreviva Cat.
— ¿Y qué pasa con ellos?— dijo Cat refiriéndose a Brittany a Wesley.
— Sí, ¿qué pasará con nosotros?— preguntó Wesley.
— Os llevaremos con nosotros— respondió Simon.
— ¿Y para eso me he tragado el puto localizador?— se quejó Brittany.
— Bueno no te preocupes gracias a ti pueden encontrar a Howard y arrestarle. Ahora no podemos entretenernos. Me llevo a Cat al hospital de la base militar americana más cercana, allí tengo un amigo que podrá ayudarnos. Vosotros podéis venir con nosotros o esperar al equipo de rescate— explicó Simon.
— Yo me quedo— anunció Brittany— Voy a dar caza a Howard, no me fio que las autoridades lo arresten a pesar de todo lo que ha hecho tiene mucho dinero.
— Si van a venir a por nosotros prefiero esperar— contestó Wesley.
— Bien, entonces nosotros dos nos vamos— Simon cogió a Cat en brazos— No os preocupéis iré a buscaros después de llevar a Cat al hospital por si no apareciesen el equipo de rescate. Coged nuestras armas, nosotros no la necesitaremos. Brittany si vas a ir a por Howard ten cuidado es muy peligroso y no dudará en matarte.
— No te preocupes, no dudaré en apretar el gatillo— afirmó Brittany.

Simon se marcha con Cat en brazos hasta el barco, se montan con él y navegó hasta la costa. Por suerte el barco disponía de una radio disponible así que avisó a su amigo para que fuera a recogerles y cuando iba a avisar al equipo de rescate la radio se estropeó.
Tras una breve charla consiguió que fuera a recogerles en un puerto cercano de las Filipinas y les llevaran a la base dónde Cat sería atendida de su herida.

— ¿Y ahora qué? — preguntó Wesley.
— Yo voy a matar a Howard, tú quédate aquí y espera al equipo de rescate.

Brittany cogió una pistola y se marchó siguiendo las huellas de Howard, no sería difícil localizarle. Pero tras varias vueltas, Wesley se le acercó, el equipo de rescate había llegado así que Brittany volvió de nuevo hasta Wesley.

— No me ha dado tiempo— dijo resignada Brittany
— ¿A qué se refiere?— le preguntó el jefe del equipo de rescate— Por cierto, me llamo Liam.
— Quería arrestar a Howard Buffet, el responsable de todo este embrollo. Pero vosotros habéis llegado antes de lo previsto y no me ha dado tiempo de pillarle.
— Iremos nosotros, le arrestaremos y le haremos pagar por sus crímenes— afirmó Liam.
— En ese caso, se fue en esa dirección— les indicó Brittany.
Liam indicó a dos de sus hombres que le acompañasen. Otro oficial se dirigió a Brittany directamente— Acompáñenos mientras a nuestro navío.
— Sí claro— respondió Brittany y acto seguido siguió al oficial acompañado por Wesley hasta el navío— Gracias por salvarnos.
— Es nuestro trabajo, pero de nada— le respondió el oficial.
Entonces apareció Liam— No te lo vas a creer, estaba muerto cuando lo encontramos.
— ¿Habéis traído el cuerpo? — preguntó Brittany y el oficial le contestó con una mirada severa— Lo digo, porque si no, no se creerán que está muerto.
— Sí lo hemos traído— contestó Liam seriamente— Si me disculpa tengo que hablar con el oficial. Liam se llevó al oficial lejos de Brittany y Wesley para que no les pudieran escuchar— También hemos encontrado a otro superviviente.
— ¿En serio? ¿Es el agente Simon Griffin?— preguntó el oficial y Liam respondió negando con la cabeza— ¿Entonces quién es?
— Por lo visto es otro de los jugadores— le informó Liam.
— Pero nuestros informes decían que teníamos que buscar a Simon Griffin, Cat Benson, Brittany White y Wesley Brown— dijo extrañado el oficial.
— Por lo que me ha contado el superviviente huyó del grupo para intentar estar a salvo después de que uno de ellos intentara matarle, una tal Tyra que fue asesinada poco después por uno de los cazadores— explicó Liam.
— Bueno conduzcámosle hasta tierra firme y una vez allí confirmaremos su historia.
— Es una buena idea, Thomas— reconoció Liam— Lo malo es que no hemos encontrado al agente Simon Griffin ni tampoco a Cat Benson.
— Será un duro golpe para Lionel Benson, no sólo ha perdido a su hija sino también a uno de sus mejores agentes. Mañana haremos una búsqueda para encontrar los cuerpos, por ahora concentrémonos en prestar el mejor servicio posible a los supervivientes— contestó Thomas.
— No quiero retrasar la noticia, será mejor que le llame enseguida o lo hará él— dijo algo consternado Liam y marcó el número de Lionel— Hola, soy el agente Liam Kepler.
— Al habla el director del FBI, Lionel Benson. ¿De qué se trata?
— Soy el jefe del equipo de rescate y tengo la buena noticia de que hemos conseguido encontrar supervivientes— respondió Liam.

— ¿En serio? Bueno, vale está bien, gracias. Acojan a los supervivientes, denles de comer y un sitio dónde hospedarse, nosotros nos dirigimos hacia allí. Llegaremos a las 23:30 de hoy mismo, resérvenos a una habitación para nosotros también. ¿Sabe ya cuántos han sobrevivido?— le preguntó Lionel por teléfono.
— Dos— contestó Liam.
— ¿Podría decirme si entre ellos se encuentra mi hija?— insistió Lionel.
— Lamento comunicarle señor Benson que no hemos encontrado ni a su hija ni a su agente en la isla— le comunicó Liam.
— Entiendo, muchas gracias— Lionel colgó.

Durante el largo viaje, hicieron varias paradas para repostar. Primero en Barcelona España, después en Ankara, Turquía y finalmente en Ratmalana, India. Una vez en la India se encontrarían con los jugadores y los llevarían de vuelta hacia su país.

Simon llegó al hospital y tras atender a Cat, su amigo de la infancia, Julian le miró asombrado—¿Quién lo habría dicho? Tú con la hija del jefe.
— Venga ya, no seas ridículo…¿Tanto se me nota?— Julian asintió como respuesta— Pues sí, me gusta. Ella es…totalmente diferente a todas las mujeres que he conocido.
— Al menos has conseguido algo más que una nota en tu currículum con este trabajo.
Simon no quiso entrar en ese tema— Gracias por tu ayuda por cierto.
— Es lo mínimo que podía hacer por ti— respondió Julian
Acto seguido entraron en el hospital el equipo de rescate con Brittany y Wesley quienes se marcharon a sus respectivas habitaciones para recuperarse; Liam fue el primero en sorprenderse al ver a Simon— ¿Pero qué ven mis ojos? ¡Creí que estabas muerto! ¿Cómo has llegado hasta aquí?
— Con el barco de los cazadores—respondió Simon— siento no haber informado pero se me estropeó la radio.
— Bueno me has hecho dar la mala noticia a Benson, después de la alegría de ver a su hija viva me matará— se quejó Liam.
— No te preocupes, sólo me matará a mí— le aseguró Simon.
— Viejo cabrón, verás cuando de la buena noticia a los chicos— comentó alegre Liam.
— Por cierto, ¿arrestasteis a Howard Buffet?— preguntó Simon
— No, estaba muerto hemos traído el cadáver, ya sabes por si acaso. Eso sí, encontramos otro superviviente. Nos pareció extraño así que lo íbamos a investigar cuando llegásemos a tierra, está en el hospital — contestó Liam.
Simon se mostró alterado—. ¿En qué habitación está?
— En la 211. Pero tranquilízate, está custodiado por Thomas.
— Ese no es un superviviente es el secuestrador, el muy hijo de puta sobrevivió— dijo Simon mientras corría hacia la habitación 211 y Liam le siguió de cerca. Simon abrió la puerta y la habitación estaba vacía salvo por el cuerpo inerte de Thomas—¡Maldita sea! Hemos llegado tarde.
— ¡Thomas!— dijo con rabia Liam— Enfermera, atienda a este hombre por favor.
Una enfermera acudió, pero tras tocar el cuerpo negó con la cabeza— Lo siento— la enfermera se marchó poco después con el cuerpo de Thomas a la morgue.
— ¿Quién cojones era ese tío Simon?— le preguntó Liam.
— Es el que secuestró a las víctimas y sospecho que es un asesino a sueldo, uno de los mejores— Liam se quedó atónito ante esa revelación— Pero yo soy mejor y pienso matarle. Ya sé qué hace mucho que no actúo, pero debemos vengar la muerte de Thomas y este tío no va a dejar que lo arresten Liam, es demasiado bueno. Al menos Buffet está muerto.
— Pues que sepas que si vas a matar al que ha hecho esto a Thomas pienso ayudarte.
— No Liam. Yo soy uno de ellos, ¿recuerdas? Por eso me reclutó el FBI. SI voy a dar caza a uno de los míos tendré que hacerlo sólo.
— Lo entiendo. Esto no saldrá de aquí Simon y si cambias de idea te ayudaré en lo que pueda para dar con ese cabrón— respondió Liam y poco después ambos se marcharon.

Lionel y Jared llegaron hasta la base militar y tras pasar las rutinarias medidas de seguridad llegaron hasta el hospital donde se encontraban los supervivientes.

— Bueno será mejor que vayamos a ver a los supervivientes.
— Señor, ¿seguro que está bien?— le preguntó Jared, Lionel le contestó con una mirada de asesino— Vale de acuerdo.
De pronto en un pasillo vio a Simon— ¿Pero qué haces tú aquí? Me dijeron que no os encontraron en la isla. Creí que estabas muerto.
— Sí, fue un pequeño error— reconoció Liam.
— Usted cállese— le ordenó Lionel. Liam obedeció— ¿Y bien?
— Pues me tuve que ir antes de la isla porque tenía que llevar a su hija al hospital, así que Julian— dijo Simon señalando a su amigo— me ayudó a venir hasta la base.
— ¿Mi hija está viva? — preguntó Lionel ilusionado.
— Sí, está en la habitación 116. Vaya a verla si quiere— respondió Simon.
— Gracias— Lionel se marchó.
— ¿Y qué ha pasado con Buffet?— preguntó Jared.
— Pues ya de paso os lo muestro— dijo Liam y guio a Jared y a Simon hasta la morgue dónde se encontraba el cuerpo de Howard— Por suerte le quedó la cabeza para poder identificarle— Liam abrió uno de los departamentos y enseñó el cuerpo, o más bien lo que quedaba de él, de Howard Buffet— Creemos que fue asesinado.
Simon cayó en la cuenta de lo que había pasado— Ay que joderse. Él mató a Howard.
— ¿Te refieres al secuestrador?— preguntó Liam y Simon asintió— ¿Cómo iba a matarlo?
— Ya has visto de lo que es capaz— respondió Simon.
— ¿Y qué piensas hacer?— preguntó Jared.
— Pienso hacer lo que mejor se me da— respondió Simon y no hizo falta que dijera nada más— Si me disculpas. Voy a ver qué tal está Cat.
— Te acompaño— dijo Jared y ambos se marcharon dejando a Liam solo.
— Ya puedes levantarte Thomas— le aseguró Liam.
— Menos mal, en este sitio hace un frío de muerte— Thomas se levantó— Ha sido más fácil de lo que pensaba simular mi muerte. Gracias por ayudarme a dejar libre a John, mi jefa Agatha no se hubiese puesto muy contenta sino cumplía con mi parte. Por suerte puedo dejar de fingir que soy uno de los buenos, estaba harto de esta vida. Gracias hermano.
— Nunca me ha gustado tu vida como asesino, pero eres mi hermano y te ayudaré en lo que pueda, aunque entiende que yo pertenezco al orden, no puedo seguir encubriéndote siempre— respondió Liam.
— No te preocupes, no será necesario. Iré a por mis objetivos y me iré.
— ¿Objetivos?. Pensé que era solo uno— dijo algo asustado Liam.
— Ya… las tornas han cambiado— Thomas cogió el arma de Liam y le disparó— Siento hacerte esto hermano pero tienen que encontrar un cadáver como si fuese el oficial Thomas— Thomas puso el cadáver de su hermano después de desnudarle y se puso su ropa— Por suerte siempre nos parecimos lo suficiente. Guardó el cadáver de su hermano en la morgue y se dirigió a por sus objetivos.

John saludó a Agatha sonriente— Hola, siento haber tardado tanto. La que han liado para que pudiera salir. Hiciste bien en confiar en Thomas, se encargará del resto de objetivos él. Yo ya he cumplido mi parte. ¿Dónde está mi millón?
— Aquí tienes— Agatha le entregó el maletín— ¿Cómo murió?
— Te lo contaré— respondió John.

Howard había huido de la escena con temor, ¿cómo había podido pasar aquello? Estaba herido y le habían robado el barco para escapar. No tenía elección, si quería salir vivo de allí tendría que entregarse a las autoridades. Así que lo único que tenía que hacer es esconderse hasta que las autoridades entraran en la isla, ¿cuánto podrían tardar? ¿Tal vez unas dos horas? Si se mantenía alejado de Brittany tenía una posibilidad de escapar vivo. Escuchó pasos detrás suya y por un momento se asustó, pero luego vio que era… no podía ser. ¿Cómo había sobrevivido?

— Verás Howard he tenido tiempo de adiestrar a tu mascota mientras tú y los jugadores os peleabais a ese extraño juego de supervivencia. He visto todo lo que ha sucedido, es gracioso parece que mi plan ha salido a pedir de boca. Pensaba matarte cuando tus hombres te traicionasen, pero debo de reconocer que el hecho que tus propias presas te hayan dado caza ha sido gracioso.
— ¡Te vi morir!—aseguró Howard.
— No, tú creíste que me habías visto morir. Mi muerte fue fingida obviamente, sino no podría estar aquí. ¿De veras que no te lo esperabas?. Lo curioso es que todo esto debo admitirlo no fue idea mía, sino de Agatha.
— ¡Mientes! Mi hija posee devoción por mí.
— En realidad, sólo la posee hacia tu dinero. Pero cuando vio tus jueguecitos comprendió que lo más probable era que te lo gastaras todo y no le dejaras ni un céntimo. Por eso te sugirió hacer este juego, un juego dónde sabía que te entrometerías hasta el punto de poner en peligro tu propia vida. Y una vez dentro de la isla cualquier cosa podría pasar. Y encima como eres un sádico hijo de puta jamás investigarán tu muerte y mucho menos cuando vean lo que quedará de tu cuerpo. No te preocupes me aseguraré de que quede tu cabeza para que puedan identificarte y así tu hija lo heredará todo. Incluido esas cuentas en las Caimán que creías ocultas.
— Debo de reconocer, John, que has aprendido muy rápido de tu maestro.
— Es bastante interesante— reconoció Agatha cuando John terminó de contar su historia.
— Sí y lo mejor es que todas las culpas recaerán sobre tu exnovio Jack, así que dos pájaros de un tiro— respondió John
— Sube— le indicó Agatha y ambos subieron a su coche— Bien. ¿A dónde quieres amor?
— A dónde tú prefieras.

Ambos se alejaron con el sol a sus espaldas y con una fortuna billonaria en sus bolsillos el mundo ahora era suyo. Thomas llegó hasta la habitación 116 y se encontró con Cat tumbada, Simon, Jared y Lionel habían salido convenientemente al enterarse del disparo en la morgue. Thomas apuntó a Cat, pero cuando disparó no había más que plumas en la cama. Se quedó perplejo y entonces notó un cañón sobre su nuca.

— Vaya esto sí que me sorprende— reconoció Thomas.
— Eso es lo mismo que dijo Simon cuando se enteró de que era agente de la CIA.
— Espera…¿qué?
— Sabíamos que eras un asesino. Reconozco que lo de Liam no lo esperábamos incluso se creyeron tu muerte, pero yo no. Te conozco demasiado bien. Llevo mucho tiempo buscándote para hacerte pagar lo que le hiciste a mi esposo. Sé que tú le mataste y sé quién te lo ordenó y pienso mataros a ambos— Cat disparó y los sesos de Thomas quedaron dispersos por toda la sala.
Entonces entraron corriendo Jared, Lionel y Simon— ¿Qué ha pasado aquí?— dijo Simon
— Intentó matarme y yo le maté antes— respondió Cat.
— Vaya hija, veo que has cambiado bastante en la isla— aseguró Lionel.
— Ante las cámaras parecías más… una víctima— dijo confuso Jared.
— Eso era lo que tenía que parecer. Yo estaba infiltrada papá, en realidad trabajo para la CIA. Y este hijo de puta es el que mató a mi esposo ahora ya puedo estar en paz.

La Prueba cap 19 por Elena Siles

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Capítulo 19

Mathew el joven informático que había contratado Isabelle y que además trabajaba en el FBI, era un joven brillante pero demasiado encerrado en el trabajo. Su pelo castaño, corto y lacio daba mucho que desear en aquellos momentos pues estaba grasiento y revuelto. Sus ojos castaños estaban rojos por el esfuerzo visual al que les había sometido en los últimos días. Se había pegado investigando todas las formas posibles para hacer que el localizador de Diane Pearson funcionase, pero había resultado inútil.
Mathew se había preparado el sexto café del día, había estado casi sin comer ni beber, y su higiene personal era horrible; sin embargo todo mereció la pena cuando el localizador comenzó a funcionar. Mathew no se lo podía creer, la única manera de que pudiese funcionar el localizador era eliminar el corta fuegos de la isla y no sabía quién lo había desconectado, pero ahora por fin ese maldito chisme emitía señal.

Mathew corrió hasta dar con su móvil y llamó a Isabelle— ¡La tengo!. He encontrado la isla, está cerca de las Filipinas.
— Gracias Mathew, avisa al FBI, yo avisaré a Diane— Isabelle marcó un número— Diane soy yo. Hemos encontrado la isla, están cerca de las Filipinas ya puedes publicar ese artículo que te hará famosa. Es tu gran oportunidad, Diane.
— Eso es una gran noticia. Gracias por esta gran oportunidad. Me has cambiado la vida por completo; muchas gracias— respondió Diane.
— Ha sido un placer. Te llamaré si tengo algo más— Isabelle colgó y miró pensativa la vista de la ciudad que tenía ante sí— Christopher, jamás imaginaste este final para tus juegos, ¿no querido? Espero sinceramente que puedas ver esto desde el infierno.
Diane guardó su móvil en el bolsillo de su pantalón y cuando se dio la vuelta vio a Jared— Tengo buenas noticias. Hemos encontrado la isla, está cerca de las Filipinas.
— ¿Qué ¿Hablas en serio?— dijo sorprendido Jared y Diane asintió como respuesta— ¿Y habéis avisado al FBI?— Diane volvió a asentir como respuesta— Entonces me tengo que ir, pronto me llamará el jefe con la noticia.
Diane suspiró— De acuerdo, te esperaré aquí con los brazos abiertos— Diane besó a Jared como despedida— No tardes, quiero esa “exclusiva” que me prometiste— Jared sonrió como respuesta, era evidente el doble sentido de aquella frase— Adiós.

Jared recogió sus cosas y se fue de la casa, Diane en cambio se quedó y decidió comenzar con el artículo que cambiaría su vida. En ese momento el jefe de Jared, Lionel Benson le llama al móvil— Hemos encontrado la Isla, está cerca de las Filipinas. He llamado a las bases americanas que tenemos en Filipinas y países cercanos para que nos presten su ayuda y aseguren el terreno. He pedido algunos favores y viajaremos en un avión privado dentro de dos horas, saldremos del aeropuerto de Baltimore.
Jared cogió el coche y condujo hasta el aeropuerto de Baltimore. Allí le esperaba Lionel que le llevó hasta el avión. Una vez dentro Jared miró expectativo a su jefe— ¿Cuánto tardaremos?
— No lo sé, unas 11 o 12 horas. Asique siéntese y póngase cómodo, va a ser un viaje muy largo— entonces de pronto sonó su teléfono— Al habla el director del FBI, Lionel Benson. ¿De qué se trata? ¿En serio? Bueno, vale está bien, gracias. Acojan a los supervivientes, denles de comer y un sitio dónde hospedarse, nosotros nos dirigimos hacia allí. Llegaremos a las 23:30 de hoy mismo, resérvenos una habitación para nosotros también. ¿Sabe ya cuántos han sobrevivido? ¿Podría decirme si entre ellos se encuentra mi hija? Entiendo, muchas gracias.
Lionel colgó y reinó el silencio, entonces comenzó a llorar. No hizo falta decir nada más.

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